Existen muchas leyendas que nos hablan sobre el descubrimiento del té.En China se cuenta que el emperador Shen Nung
(2.737 - 2.697 a.C) cambió el color del agua hirviendo...
... a color verde al añadirle las hojas que caían de un arbusto, que estaban cerca del agua y que crecían salvajes. Shen Nung no lo pensó y probó aquella magnífica y aromática bebida.Sabía exquisita y le aportó mucha energía.
Pero, ¿qué hay dentro de una taza de té verde?
En primer lugar cafeína que aumenta el metabolismo, el riego sanguíneo del cerebro, la concentración y la capacidad de aprendizaje.
También vitaminas de especial importancia: la C y la betacarotina, ambas antioxidantes y que proporcionan a esta bebida un efecto protector ante los radicales libres.El flúor y el manganeso, junto al zinc, cobre y magnesio, son otros de sus componentes.
El té verde no sólo ayuda por dentro, también muestra por fuera lo que aporta: elasticidad a la piel, disminución de los enrojecimientos cutáneos, cabello brillante, sedoso y aterciopelado.
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